Esta es una historia que puede que os hayan contando antes. Puede que os suene. Esta es La historia de la cruzada del guerrero de la armadura roja.
La cruzada del guerrero comenzaba con un castillo con tres puertas. Detrás de cada puerta el guerrero se encontraría con su adversario. Su única opción: vencerlos. Aparentemente la primera prueba sería sencilla, pero el guerrero prefirió ser cauto. Aunque se repetía una y otra vez que el PODIA hacerlo.
Detrás de la primera puerta, el guerrero rojo se encontró con el guerrero de los ojos azules, ruso, al que le fue muy fácil eliminar. Con apenas cuatro golpes logró tumbar al primer adversario. Sólo un pequeño rasguño apareció en su cara.
Con entusiasmo y decisión, abrió la segunda puerta y sin pensarlo dos veces, golpeó a su segundo rival. Esta vez, sueco. Éste no se quedó quieto y le devolvió el golpe. Los guerreros estaban tocados, cansados, era una lucha empatada. Pero entonces, el guerrero de la armadura roja, sacó su mejor espada y batió al guerrero sueco. La segunda puerta estaba superada. Y el segundo castillo esperándole.
Antes de eso, tendría que hacer una tercera parada y abrir la última puerta del castillo. Allí le esperaba el guerrero griego. No se lo puso fácil, pues en cuanto el guerrero rojo cruzó la puerta, el griego le golpeó en la cara. Fue entonces cuando el guerrero rojo despertó. Abrió los ojos y venció.
El guerrero de la armadura roja cabalgó con su caballo llamado Afición hasta el segundo castillo. Un castillo con cuatro torreones y una sola puerta. Con decisión el guerrero rojo la cruzó y se encontró de frente al cuarto guerrero: el guerrero italiano. Fue una lucha difícil. Ninguno de los dos caballeros tiraba la toalla. Su única obsesión era eliminar al adversario. La clave para hacerlo: la sernidad, el porte y una manos de oro. Cualidades que sólo poseía el guerrero rojo. Y así fue como venció al guerrero italiano. Con cuatro golpes a favor y tan sólo dos en contra, en las últimas horas de luz del día.
El guerrero dejó atrás el segundo castillo y a sus cuatro torreones y se dirigió al tercero...
Espera...
...Espera.
Puede que esta parte no te suene. Puede que no te la hayan contado. Puede que tu historia termine en el castillo de los cuatro torreones. La mia, sigue. Y sigue...
...Y sigue así
El guerrero dejó a sus espaldas el segundo castillo y cabalgó hasta el tercero, de tan sólo dos torreones. El guerrero entró en él. Estaba oscuro, pero comenzó a oir los pasos del que sería su siguiente adversario. Cuando este se puso delante, se miraron a los ojos. El guerrero rojo reconoció rápidamente aquellos ojos azules. Eran los ojos del guerrero ruso, el primer adversario con el que se encontró.
El guerrero de la armadura roja, fue cauto y pensó que si el ruso había llegado hasta aquí, esta vez no sería tan fácil eliminarle.
Energias al cien por cien, estrategia perfectamente diseñada y golpes limpios pero tan dolorosos, que hicieron imposible que el guerrero ruso se levantara de la primera patada. Dos más le llegaron y desde el suelo, vio como la armadura del guerrero rojo tornaba de color. La armadura se había convertido en dorada pero aún conservaba el brillo rojo del color del guerrero.
El guerrero salió del castillo y lleno de orgullo, levantó la cabeza. El sol le pegaba en la cara. Sólo una batalla le faltaba para terminar su cruzada y conseguir el amor de la princesa Europa.
Montó en su caballo Afición, siempre fiel al guerrero, y cabalgó hasta el último castillo. Tan sólo un torreón. Tan sólo una puerta. A tan sólo un paso del amor de su princesa...
¿Quereis saber como termina?
Domingo, 29 de Junio de 2008:
FINAL EUROCOPA 2008 DE AUSTRIA-SUIZA
ALEMANIA - ESPAÑA
¡¡ PO-DE-MOS !! ( Hay que seguir cabalgando con el guerrero hasta el FINAL!!)