martes, 26 de junio de 2007

“...No sé si el mundo está al revés o soy yo la que está cabeza abajo..”

Después de varios días con lo mismo, la misma foto y el mismo texto...me decido a actualizar. Mas bien lo hago por ‘obligación’ que por otra cosa, porque ganas me faltan.
Tengo más tiempo libre y puedo dedicarle a esto más espacio...pero lo cierto es que cuanto más tiempo tengo, menos hago, más me aburro y menos ganas tengo de hacer cosas. No tengo ganas de nada y no es por algo en concreto es simplemente cansancio y perrería.

Desánimo quizá...

..Y es que he llegado a un momento de pasotismo total. No me intereso por nada, nada me importa. Me aíslo y así estoy a gusto. Trato de evadirme de todo lo que me rodea, a veces lo consigo, otras no.

Me gusta estar en mi mundo porque ahí estoy segura, nada puede hacerme daño...
...Bueno, nada, excepto yo misma. Y es que yo he sido la persona que mas daño se ha hecho en este último tiempo. Nadie ha tenido la culpa de mis tropiezos mas que yo. Nadie ha tenido la culpa de mi desánimo, sólo yo. Yo he sido el demonio en mi cabeza. Yo he construido ese personaje dentro de mí. Un personaje que sólo me conducía a caminos equivocados, daba malos consejos, no hablaba bien de mi y me hundía en un pozo de pesimismo. Esto desencadenaba que yo me debilitara cada vez más. Yo me creía mis propios fantasmas.

Yo he construido este mundo en el que no me siento cómoda. Un mundo que no saca lo mejor de mi. Un mundo gris...Mi mundo gris.

Ahora que tomo conciencia de todo esto, intento sacar a mi demonio particular de esta cabecita loca . Porque si algo no ha cambiado en mí, es esa falta de cordura que me acompaña a todas partes y que saca mi lado infantil a relucir para mostrarme una vida llena de color.
Cuando somos pequeños y la inocencia nos domina, el mundo parece un lugar mejor. No hay preocupaciones, ni quebraderos de cabeza. Todo es mejor siendo una niña. Y yo, de algún modo sigo siéndolo. No me importa, al contrario, me gusta tener, en algunos momentos, esa inocencia infantil. De ahí tengo que tirar, de ese espíritu que es capaz de colorear mi mundo.

“Hubo una vez hace mucho tiempo que tuve un sueño...en que dejaba de ser mayor para ser otra vez pequeño...” (8)

Espero, yo también ;), volver a recuperar esas ganas de hacer cosas. Esas ganas de sonreír por todo y por nada. Esa ‘hiperactividad’ que siempre me ha acompañado.

...Quiero recuperar mis ganas de comerme el mundo!!!!!

[ La última entrada de Isabel =p me hizo pensar y de algún modo me ayudo a inspirarme. Asias ;)]



domingo, 17 de junio de 2007

...eNCoNTRaNdo eL RuMBo...


Tres años después y tres fracasos después, la historia vuelve a repetirse.

Quien le ha visto y quien le ve. Perdido, sin rumbo, errático. Cree saber cual es su meta, pero recorre el camino sin saber porque tiene que hacerlo. Lo ha olvidado. Ha olvidado quien era. Ha abandonado su vida. Y ahora, su verdadera meta es recuperarse a sí mismo, recuperar esa vida perdida. Encontrar lo que un día fue y que en realidad es. Recuperar lo que un día fue es demostrar que él es grande por ser quien es, que es grande por ser él mismo. Todo lo que ha conseguido ( tanto lo bueno como lo malo) ha sido fruto de su identidad, de su particular forma de ser y vivir la vida. Todo lo que tiene lo ha conseguido sólo. Encontrase a sí mismo es demostrar a todo el mundo que es grande y que merece lo mejor. Encontrarse a sí mismo significa volver a confiar, luchar por lo que se quiere y creer que puede conseguirse. Creer que se puede con todo. Creer que nadie, ahora que vuelves a tenerte, puede pararte.

La lista de adjetivos degradantes se ha quedado pequeña. Se los ha ganado, lo sé, pero duele leerla. Se ha ganado lo que tiene. Ha ganado nada. Se ha perdido a sí mismo y si no hace algo ya, acabará por perder algo más. Aceptamos pulpo como animal de compañía. Pero todo, tiene un límite.

Se hunde cada vez más en su propio pozo y los demás se aprovechan de ello comiendo de sus colores. A veces, ni el atracón sirve a sus invitados para quedarse llenos.


Hacemos de la situación algo normal, algo que está así y no se puede cambiar. Empezamos a aceptar una situación pésima, convertida en rutina, sólo porque nos hemos acostumbrando a ella y creemos que es lo lógico. Lo aceptamos en lugar de luchar por lo que queremos. Esta situación NO ES LÓGICA.


....Tengo que dejar de cubrir mis heridas con tiritas de normalidad...

Hay que despertar del coma. Con rabia, con impotencia, con el corazón saciado y empachado de tristes momentos y desilusiones. Pero hay que despertar. Una vez despierto: muévete, haz algo de ruido. Despierta y recupera tu identidad.


Hay que salir a flote. Hay que recuperarse a uno mismo. Hay que volver a ser lo que se era, porque realmente, es lo más valioso que se tiene. Primero uno mismo. Primero mi felicidad. Primero mi vida. Primero yo. Después... el resto.


Para esto, tiempo. Tiempo y espacio. Siempre he defendido que hay que luchar hasta el final. Pero aquí, aún no hay final. Por eso necesito descansar, renovar fuerzas y recuperar la ilusión. Esa ilusión que poco a poco se ha ido separando de mí, debido a los constantes tropiezos. Necesito dejar a un lado la desgana por esos colores y recuperar el interés y esas ganas fanáticas de apoyarle devotamente ...

... Quizás no hable sólo de él ...